La correcta planificación, diseño, implementación y mantenimiento de páginas online mejoran el posicionamiento de marca de los negocios y ayudan a incrementar la facturación
Internet se ha convertido en un recurso imprescindible para cualquier negocio. Las posibilidades que ofrece de difusión, publicidad y reconocimiento son tan grandes que ninguna empresa, por pequeña que sea, puede descartarlas. Esto se ha puesto de manifiesto en esta época de confinamiento por el COVID-19 cuando cientos de pequeños negocios sin presencia online han tenido que adaptarse a marchas forzadas e invertir en diseño web para poder subsistir y generar algo de ingresos en esa crisis sanitaria.
La cruda realidad ha puesto de manifiesto que los negocios no estaban actuando bien y habían dejado de lado el ámbito digital pensando que su funcionamiento y forma de llegar a los clientes no iba a cambiar con las nuevas tecnologías. Y han tenido que aprenderlo de este modo y a marchas forzadas una ingente cantidad de empresas, ya que, según datos del Observatorio Nacional de las Telecomunicaciones y de la SI y red.es, más de la mitad de las pequeñas empresas y autónomos de España todavía carecen de página web.
Pero, no nos engañemos, la página web es sólo el primer paso dentro de esta obligada necesidad que tienen todas las empresas y profesionales de adaptarse a las nuevas tecnologías. En cuanto a los aspectos básicos de la web, el diseño de la página debe ser responsive , ofrecer una fácil navegación y estar estructurada técnicamente para que posicione de la mejor forma posible en la red de una forma orgánica.
Con estos pilares básicos será más fácil posicionar la web en los buscadores y hacer más visible nuestra marca, incrementando nuestras posibilidades de venta y de aumentar nuestra facturación. No obstante, esto es lo básico, ya que hay que hacer mucho más para lograr ese posicionamiento y relevancia tan importante hoy en día para cualquier negocio. Y todo esto hay que conseguirlo con un diseño atractivo, que enganche a los usuarios y que incremento el tiempo de visita en la web.
En este sentido, el diseño web también debe tener en cuenta y combinarse con los contenidos y los textos de la página, que van a ayudar a lograr es posicionamiento online tan deseado por todas las compañías. El texto tiene que ser atractivo, llamativo y llamar a la acción, generando siempre un contenido de valor y útil para los usuarios. Sólo de este modo lograremos captar la atención de nuestro público objetivo y lograr que terminen haciendo lo que todos deseamos: comprando.